Para variar, comenzamos perdiendo. El hombre es un animal de costumbres y nosotros no íbamos a ser la excepción, suerte que Víctor empataría de penalti para hacernos creer en la causa. Con las ilusiones intactas recibiríamos un segundo mazazo. El equipo cedió, crujió, pero no llegó a quebrarse, la reacción no tardó en llegar y Alvarete se inventó un golazo para poner, de nuevo, las tablas en el marcador. Más tarde, Carletes abrió la herida y nos puso por delante en el marcador. El Linares, por primera vez en toda la liga, andaba por debajo en el marcador, desconcertado, desorientado. Nuestra superioridad nunca volvió a verse amenazada. Ya entrada la segunda parte, Javi agarró el balón y se filtró en la defensa rival para hacer el cuarto. El Linares acortó distancias para intentar cortar la hemorragia, pero Javi decidió entonces que este partido se quedaba en casa. Recibió en el balcón del área y cruzó el balón al segundo palo. 5-3.
En fin, pues esta gesta de dimensiones faraónicas queda reducida a la categoría de dulce recuerdo, y en el fútbol, nos guste o no, nadie vive de fotografías amarillentas. Ya es historia, ya es pasado. Mañana recibimos al Atlético Jaén (que también desconoce la derrota en esta liga) en lo que será nuestro 12º compromiso liguero. El partido dará comienzo a las 16:30 horas en el campo Sebastián Barajas, por lo que nuestra citación quedará fijada a las 16:00 horas en ese mismo campo de juego.
A continuación os dejo la lista de convocados para este partido, doce niños que deberán acudir vestidos con la equipación de juego:
1. Daniel Bautista

2. Alejandro Fernández
3. Alejandro Mesa
4. Álvaro Ruiz
5. Carlos Catena
6. Daniel Blanco
7. David Armenteros
8. Guillermo Bonilla
9. Javier Álvarez
10. Javier Hidalgo
11. Mario Almagro
12. Víctor Pérez
Arrancamos la segunda vuelta. Si algo hemos aprendido durante esta primera etapa de la competición es (además de otras muchas cosas) que con trabajo y esfuerzo se puede conseguir cualquier cosa que nos propongamos. Pero si no lo hacemos así, también nos puede ganar cualquiera. Así que para este próximo partido intentaremos poner en práctica lo que hemos aprendido. Si ganamos, genial. Y si perdemos, también. Como siempre recordamos a nuestros niños antes de cada partido, los objetivos prioritarios son aprender y pasarlo bien.
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